El cardiólogo
César Berenstein, habitual colaborador de EL PUEBLO, estuvo recientemente de
vacaciones en Villa Domínguez y aprovechó su estadía para ofrecer una charla
sobre su especialidad en el Centro de Jubilados.
Habló sobre temas
como la hipertensión, el colesterol, el tabaquismo, el cuidado de la salud en
la tercera edad, la importancia de realizar actividad física y la necesidad de hacerse
controles médicos periódicamente.
También respondió
preguntas de los asistentes con el estilo claro y ameno que lo caracteriza.
Finalmente tomó una guitarra e interpretó canciones que hablan sobre los mismos
temas de su charla, acompañado por Hugo Robín en acordeón.
"Él vino a
visitar familiares y además dio una gran charla, porque no puede dejar de hacer
lo que ama. Es una eminencia en lo suyo y más como persona. Fue uno de los
médicos que nos ayudó a atravesar el difícil momento con mi hijo. Así que no
tenemos palabras de agradecimiento", expresó uno de los asistentes en
diálogo con este medio.
César Berenstein
nació en Buenos Aires pero sus padres lo enviaban todos los años a Villa
Domínguez para que pasara mis vacaciones junto a sus "tíos del
campo", según recordó el año pasado en una nota en este diario.
Actualmente reside
en la localidad de El Bolsón, en la provincia de Río Negro, pero cada verano
cumple con la promesa de volver a Domínguez que les hizo hace ya mucho tiempo a
sus "tíos eternos e inagotables" y ellos lo esperan "como cuando
era adolescente, con la misma alegría".
Menos sal, menos tabaco
Berenstein está comprometido con la campaña
"25x25": un plan que se propone reducir un 25% las muertes por enfermedades
cardiovasculares para el año 2025.
El proyecto va en línea
con la propuesta de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para reducir las
muertes causadas por cuatro de las patologías más importantes de la actualidad:
las enfermedades cardiovasculares y respiratorias, la diabetes y el
cáncer.
En ese marco, se
impulsan medidas como la disminución del 30% de la sal en las comidas y del 30%
en el consumo de tabaco. También se apunta a reducir un 25% el número de
argentinos que tienen presión arterial elevada y a lograr que el 80% de los
pacientes accedan a los medicamentos esenciales y tratamientos para las
enfermedades cardiovasculares.
La campaña fue lanzada
por la World Heart Federation (WHF) en 2012 y compartida por la Sociedad
Argentina de Cardiología (SAC) y la Fundación Cardiológica Argentina (FCA).