Este año volvió a explotar la imagen de una de las parejas más mediáticas de Hollywood: Ben Affleck y Jennifer López se reencontraron después de 20 años.
Según trascendió, la pareja se encuentra preparando su contrato prenupcial. La sorpresa llegó cuando se conoció que una de las cláusulas establece que deberán tener sexo al menos cuatro veces por semana.
¿Qué dicen los especialistas?
“Hay que romper un concepto que todavía está arraigado, de que tener sexo es solo genitalidad. Es una mirada muy focalizada en el coito cuando en realidad el encuentro sexual es erótico-sexual, por lo tanto comprende toda una serie de prácticas que van desde caricias, besos, masajes, abrazos, sexo oral, masturbación. Es decir, un conjunto de acciones que pueden finalizar o no en un coito”, define el médico psiquiatra y sexólogo Walter Ghedin (M.N. 74.794), autor de ‘La Heterosexualidad sale del Closet’.
Para el experto, poner una cláusula es absurdo cuando en realidad las primeras cosas que tienen que aparecer son el deseo y las ganas de estar con la otra persona.
Planificar el sexo para encontrar el espacio erótico
“Planificar un encuentro sexual forma parte del tratamiento sexológico. A veces, parece abrumador porque hay personas que están tratando de reencontrarse con lo espontáneo en el sexo, y ante una indicación de este estilo, se frustran”, reconoce Federico Rinaldi, psicólogo (M.N. 46.757) y miembro de la Sociedad Argentina de Sexualidad Humana (SASH).
“Cuando las personas tienen pareja, dan por hecha la química y son pocos los que la cultivan. Los momentos para hacer planes juntos, muchas veces quedan en el pasado, se suele creer que la relación funciona sola, y eso es un error”, señala Rinaldi.
Los momentos a solas, lejos de los hijos, el trabajo y el celular, podrían ayudar. Hacer una agenda sexual tiene que ver con cosas simples como:
- Definir la frecuencia.
- Planear salidas a solas: una cena, un día entero, un fin de semana.
- Construir un ambiente erótico.
- Estar abiertos a la escucha y a proponer nuevos caminos de seducción y concreción de las fantasías.