Lucas Martínez, el mediocampista creativo del Club Atlético Peñarol recibió un brutal codazo cuando disputaba la segunda fecha de la divisional A de la Liga Paranaense de Fútbol (LPF), frente a Universitario, el domingo pasado.
El jugador de Peña recibió el golpe en cruce con Gastón Aparicio y sufrió una herida profunda en la parte derecha de la cara. El codazo le provocó el sangrado y tuvo que ser trasladado a una clínica privada de la capital entrerriana.
Por la cantidad de sangre que perdió, se descompensó y estuvo toda la noche internado en observación. Fue intervenido quirúrgicamente y recibió 12 puntos de sutura.
"Voy mejorando de a poco, fue un duro golpe. Sólo quiero agradecer al cuerpo técnico, dirigentes y compañeros de Peñarol que estuvieron y están a mi disposición. Principalmente al presidente del club Leandro Clementi y sus colaboradores Juanjo Novoa, Roberto González e Ignacio Ayala. Quienes fueron los que hicieron lo posible para que me atiendan en la Clínica ya que el seguro obliga a los clubes de hacer convenio con el Instituto del Seguro, el cual sólo cubre a niños de 5 hasta los 20 años por ende los dirigente del club tuvieron que hacerse cargo de los gastos", detalló, en diálogo con el diario Uno.
El jugador remarcó que "los jugadores de Primera División no contamos con ningún tipo de seguro pero creo que ese problema tendría que arreglar la LPF en la brevedad. Gracias a Dios no fue algo tan grave, la verdad es que estoy eternamente agradecido con mi gente. Comprobé que el Tricolor es una gran Familia", reflexionó. (Fuente: Uno Entre Ríos).
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