Condenan a dos hermanos por un asesinato a puñaladas
El domingo 17 de junio pasado, César Rolón de 33 años, fue atacado a puñaladas cuando caminaba por las calles internas del barrio Belgrano de la ciudad en Paraná. Los agresores fueron los hermanos, José y Brian Pereyra, quienes aplicaron varias puñaladas a Rolón en diferentes partes del cuerpo, fundamentalmente, en la parte craneal y abdominal.
Rolón permaneció internado en el hospital San Martín, hasta el 18 de junio, cuando falleció producto de las heridas.
Se pudo conocer que Rolón, se cruzó con unos muchachos, con los que venía teniendo problemas de vieja data, entre la familia de la víctima y sus contrincantes.
Posteriormente, los hermanos Pereyra, fueron detenidos por el homicidio ocurrido en barrio Belgrano.
Los sucesos que desencadenaron el ataque mortal, fue un problema de vieja data, entre uno de los hermanos Pereyra y la víctima.
En la investigación, se ventiló que José y Brian Pereyra le asestaron a Rolón, dos puntazos letales, uno en la zona del tórax y el otro en el cráneo.
Una serie de testigos relataron las circunstancias de tiempo, modo y lugar del hecho y pudieron sindicar a los hermanos Pereyra como los autores del crimen. Incluso, uno de ellos, detalló que uno de los hermanos, habría usado una cuchilla de importante tamaño para cometer el crimen.
José Pereyra de 30 años y Brian Pereyra de 23 años, llegaron este martes a tribunales, para el acuerdo de juicio abreviado en el que fueron condenados.
En los tribunales, se ventiló este martes que José tiene antecedentes y había sido detenido en 2016, por portar un arma de guerra, supo Elonce. En tanto, Brian, también tiene antecedentes y ambos, manifestaron que consumían estupefacientes.
En el acuerdo de juicio abreviado, la condena para Brian es de 10 años de prisión efectiva, teniendo en cuenta el homicidio y los antecedentes que tenía.
Por su parte, el tribunal decidió condenar a José Pereyra, a 11 años y 6 meses de prisión por el homicidio de César Rolón y también, se computan sus antecedentes.
Una de las contundentes pruebas que se utilizaron para establecer la autoría del crimen fue un video aportados por testigos del hecho de sangre, que grabaron imágenes del momento del ataque. La familia de la víctima pudo acceder al video y lo replicaron en las redes sociales. (Fuente: El Once).