Desde la jefatura se informó anteayer que el personal policial detuvo a un muchacho de 27 años por el supuesto delito de 'Desobediencia Judicial' tras ser sorprendido en la casa de su expareja, de 25 años, pese a tener prohibición de acercarse a ese lugar.
Ayer, la chica le aclaró a este diario que la restricción de acercamiento es sólo hacia ella, no hacia sus hijos. "Entonces él vino porque la nena más chiquita lo extrañaba y lo llamaba", contó.
Ayer, la chica le aclaró a este diario que la restricción de acercamiento es sólo hacia ella, no hacia sus hijos. "Entonces él vino porque la nena más chiquita lo extrañaba y lo llamaba", contó.
El problema es que fue visto por una vecina, que llamó a la policía "sabiendo que podía armar problemas". Al rato llegaron unos efectivos policiales y le preguntaron a la joven si el marido estaba en la casa. "Les dije que no. Estuve mal pero yo sabía lo que iba a pasar [si les decía la verdad]", sostuvo.
Los policías se fueron pero uno de ellos permaneció en la esquina. Después volvió y anunció que iba a entrar a revisar. "No tenía ninguna orden ni nada" pero igualmente ingresó a la vivienda y sacó a la calle a la joven, a sus hijos y a su exmarido.
"A mí me sacaron con los nenes en el frío y a él lo empujaron al barro. Pero no estaba haciendo nada malo; solamente había pasado a ver a su hija, nada más", reveló la mujer.
"Por más que nosotros tengamos solamente un rancho, la policía no tiene por qué tirarnos todas las cosas al suelo", sobre todo sabiendo que soy la víctima en todo esto. Si yo no estaba en peligro y no los llamé, ellos no tendrían por qué haber venido a hacer lo que hicieron", afirmó.
También cuestionó el hecho de que el primero de los policías haya llamado a otros y todo terminara en un "alboroto" de uniformados en camionetas y motos para detener a una sola persona.
Aparentemente, la reacción policial habría tenido que ver con que el muchacho habría estado armado con un cuchillo, pero su exmujer remarcó que "no lo tenía cuando estuvo en esta casa" y, de hecho, no se menciona tal cosa en el informe de la jefatura.
Finalmente, la joven anticipó que va a "poner un abogado", ya que el comportamiento de los uniformados podría ser calificado como "abuso de autoridad".
Los policías se fueron pero uno de ellos permaneció en la esquina. Después volvió y anunció que iba a entrar a revisar. "No tenía ninguna orden ni nada" pero igualmente ingresó a la vivienda y sacó a la calle a la joven, a sus hijos y a su exmarido.
"A mí me sacaron con los nenes en el frío y a él lo empujaron al barro. Pero no estaba haciendo nada malo; solamente había pasado a ver a su hija, nada más", reveló la mujer.
"Por más que nosotros tengamos solamente un rancho, la policía no tiene por qué tirarnos todas las cosas al suelo", sobre todo sabiendo que soy la víctima en todo esto. Si yo no estaba en peligro y no los llamé, ellos no tendrían por qué haber venido a hacer lo que hicieron", afirmó.
También cuestionó el hecho de que el primero de los policías haya llamado a otros y todo terminara en un "alboroto" de uniformados en camionetas y motos para detener a una sola persona.
Aparentemente, la reacción policial habría tenido que ver con que el muchacho habría estado armado con un cuchillo, pero su exmujer remarcó que "no lo tenía cuando estuvo en esta casa" y, de hecho, no se menciona tal cosa en el informe de la jefatura.
Finalmente, la joven anticipó que va a "poner un abogado", ya que el comportamiento de los uniformados podría ser calificado como "abuso de autoridad".