Luciana Villo. “ESTOY CONTENTA PORQUE LES PUDE OPONER DURA RESISTENCIA A LOS MEJORES”



Luciana Villo ha logrado cosas muy importantes dentro del ajedrez y es sin dudas una embajadora de nuestra ciudad en este deporte, debido a sus múltiples y exitosas participaciones en campeonatos Entrerrianos y Argentinos desarrollados en nuestra provincia y en distintos lugares del país. Tuvo un comienzo arrollador siendo muy pequeña y con enormes resultados en su adolescencia, los cuales la llevaron a meterse en la elite de Entre Ríos, pero luego detuvo la inercia de su carrera para estudiar, formar una familia y criar a su hijo. Una circunstancia de salud potenció sus ganas de recuperar el terreno perdido y volvió con todo, jugando torneos y buscando reinsertarse entre los mejores de la provincia.


- ¿Qué análisis hacés de tu presencia en el Torneo Entrerriano Superior de Ajedrez?

- Me fue bastante bien, quedé en la mitad de la tabla (puesto 15), me complicó un poco el sistema (suizo) que se utilizó porque hace mucho que no jugaba a este nivel, pero estoy muy contenta de participar nuevamente en el torneo más grande de Entre Ríos. Estuve durante todo el desarrollo luchando con los mejores jugadores de la provincia y en la última parte me superaron los campeones. Ellos estudian todos los días y tienen una carrera ajedrecística que en la mayoría de los casos data de más de 20 años. En este torneo se ve bien donde uno está parado, yo íntimamente pensaba en quedar mejor posicionada pero el sistema es un poco injusto en este sentido. Aunque haciendo un análisis de las partidas que disputé estoy contenta, porque tuve excelentes rendimientos y les pude oponer una dura resistencia a los mejores como por ejemplo a Gastón Magallán, que es Campeón Entrerriano.


- ¿Cómo ha sido tu vida junto al ajedrez?

- Desde muy chiquita me gustaba el ajedrez. En la Escuela N° 87 “Luis Piedrabuena” teníamos un profesor (Martín González) quien nos enseñaba para complementarlo con el resto de las materias. Me acuerdo que al principio siempre perdía, pero no me importaba porque me sentaba en otro tablero y seguía jugando (risas). Mucho tuvo que ver mi perseverancia de continuar insistiendo y él notó algo en mí por lo cual me cambió de grupo y comencé a progresar. En el primer torneo que jugué salí campeona, eso me provocó un gran entusiasmo y traté de seguir adelante poniendo mucha constancia de mi parte. Jugué una numerosa cantidad de torneos Entrerrianos y Argentinos, conocí casi todo el país jugando al ajedrez. Eso hizo que acumule un Ranking Internacional bastante alto (llegué a tener 1.860 puntos ELO) y es lo que pretendo recuperar luego de haberme alejado de la actividad durante algunos años porque me dediqué a estudiar y a mi familia, me fui a vivir a Hasenkamp, también estuve criando a mi hijo. No tenía el tiempo libre como para estudiar ajedrez, por supuesto que seguí jugando y “moviendo piezas” (como le decimos nosotros), pero sin participar en torneos. Continué con mi vida, me recibí de profesora de historia y de licenciada en educación. Cuando llegó la pandemia me propuse arrancar de nuevo con este objetivo de recuperar mi carrera ajedrecística, porque mi hijo ya está más grande y puedo volver a dedicarme a estudiar ajedrez y disputar torneos importantes. A partir de los 2.000 puntos ELO se puede llegar al título de Maestra Internacional, que es lo que intento conseguir. En este momento estoy en 1.790, así que me falta disputar unos cuantos torneos oficiales más, tratando de vencer a jugadores con ELO para sumar los puntos necesarios. Se abre un panorama interesante al lograr el título de Maestra Internacional porque se convierte en jugador profesional, ya que se lo invitan a participar en distintos torneos, se le dan viáticos, inscripción, alojamiento, comida y también se le paga un dinero por participar.



- Ha cambiado el paradigma del jugador de ajedrez. Ahora muchos se entrenan físicamente en diferentes formas, lo cual ayuda al desarrollo de la actividad mental.

- Sí, es verdad, en estos últimos años se ha descubierto como eleva el rendimiento del jugador de ajedrez si se encuentra en buen estado físico, sobretodo para afrontar las situaciones en partidas largas. Y tenemos ejemplos en los mejores de mundo como el noruego Magnus Carlsen, quien juega al fútbol y al básquet. Acá en Argentina uno de los mejores como Sandro Mareco entrena un montón y hace gimnasia. Yo salgo a correr para complementar el entrenamiento mental ya que el pedestrismo me brinda una gran ayuda psicológica y el poder de mente que se aplica muy bien a lo que necesitamos para jugar al ajedrez. Empecé a practicar pedestrismo desde 2016 en Hasenkamp y lo sigo haciendo en la actualidad en la Agrupación Running Villaguay, con Ramón Rebossio como entrenador.


- En una competencia de pedestrismo te sucedió algo totalmente inesperado.

- Sí, tuve un inconveniente de salud en abril de 2018 durante una prueba que se realizó en Paraná - Santa Fe en conmemoración a los Héroes de Malvinas y que incluía el paso por adentro del túnel. Era un día de muchísimo calor, casi no había aire y la organización de la carrera no fue la mejor en cuanto al agua así que me deshidraté, lo cual me provocó una angina inestable con un pre infarto. La pasé bastante feo, no recuerdo nada porque caí desmayada, me llevaron de urgencia al hospital San Martín donde estuve bastante tiempo internada y me atendieron muy bien. Me hicieron un montón de análisis y estudios hasta darme el alta, pero los doctores no me dejaban realizar actividad física, por lo cual estuve sin entrenar aproximadamente por dos años. No se sabe bien que me pasó, inclusive realizaron junta de médicos, porque tenía 32 años en aquel momento como para hacer ese episodio. Se llegó a la conclusión de que el tremendo calor, la falta de hidratación correcta y los gases que se acumulan en el túnel además de la falta de oxígeno por su baja altura, pudieron ser los desencadenantes. No fui la única, ya que un montón de gente se deshidrató en esa carrera, pero los más graves fueron los casos de un atleta santafecino y el mío. Este chico, de muy buen nivel, estuvo en terapia intensiva junto a mí. Gracias a Dios en 2020 pude volver a entrenar (sin una exigencia extrema), estoy medicada y con controles. Me siento muy feliz de poder correr nuevamente, lógico que al principio lo hice con un poco de miedo pero después pude normalizar los entrenamientos. Es indudable que esta situación hace que se replanteen un montón de cosas, porque uno nunca se imagina que le puede pasar. Se aprende a disfrutar el momento, la familia, los amigos, la gente que uno quiere, a valorar los pequeños detalles. Me di cuenta que amo el ajedrez y ahí surgió la idea de retomar la actividad para intentar alcanzar los objetivos que tenía cuando era más joven.


- ¿Qué porcentaje de importancia en el desarrollo de tu carrera tiene Juan Pedro Villo?

- El acompañamiento de mi papá ha sido importantísimo para mi trayectoria dentro del ajedrez, un pilar fundamental. Aunque él ya sabía jugar, empezó conmigo, se potenció al ver mi entusiasmo y siempre estuvo a mi lado. Es como si fuéramos la misma persona, todo el mundo me conoce por ser la hija de Juan y a él por ser mi padre (risas). El apoyo familiar que tuve fue impresionante, también por parte de mi mamá (Liliana), quien a pesar de que nunca la nombren es la que tiene que bancar todos nuestros berrinches.


- ¿Te sorprendiste por tu rendimiento en el Torneo Entrerriano Femenino en el cual te consagraste Campeona?


- Sí, porque hace rato que no jugaba y era uno de mis primeros torneos. Traté de averiguar cómo jugaban mis rivales, porque ahora a través de internet se puede entrar a las partidas y verlas. Pero a la mayoría de ellas no las encontré en la base de datos y eso me generó cierta incertidumbre. En verdad me sorprendí por el juego que pude desarrollar y cuando estuve en Concepción del Uruguay muchas personas (a las cuales ni siquiera conozco) me felicitaron porque habían visto mis partidas por internet. Es increíble, en Hasenkamp también mucha gente me felicitó en la calle. Estoy muy contenta con el progreso que he tenido en los últimos meses.




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