
Nieto de los recordados vecinos villaguayense Estela Antonini y Hugo Miranda e hijo de Sebastián Vivanco y María Magdalena Miranda, el joven Bautista Vivanco (20) cursó la escuela primaria en Villaguay, luego vivió durante toda su adolescencia en Paraná y desde hace tres años reside en Estados Unidos, donde viene cumpliendo un destacado desempeño académico y deportivo.
Estudia la carrera de Economía y Ciencias Políticas en la Universidad de Winthrop, en la ciudad de Rock Hill, en el estado de Carolina del Sur, y al mismo tiempo ha sorprendido con sus resultados como velocista en las pruebas de medio fondo. Además trabaja en el Centro de Estudiantes y ocupa otras posiciones en la institución.
"Me encuentro muy feliz en este momento. Por un lado estoy haciendo mi doble titulación en Economía y Ciencias Políticas, que me demanda mucho tiempo. Pero también me mantengo muy enfocado en el atletismo con entrenamientos intensos durante la semana y compitiendo los fines de semana", expresó en una nota publicada recientemente en El Diario de Paraná.

"Al principio me costó porque tuve la barrera del idioma. Llegué al país con un buen nivel para hablar inglés, pero aún así no es tan fácil el lenguaje que se habla en las calles. Es como cuando alguien aprende español en España, llega a Argentina y no entiende algunas palabras que utilizamos frecuentemente", explicó.
También dijo que "las diferencias culturales entre los países son enormes" pero que afortunadamente se encontró con mucha gente que comprendió su situación y lo ayudó a adaptarse.
"También me costó muchísimo la adaptación en lo deportivo. En Argentina tenía entrenamientos más livianos, divertidos, mucho menos exigentes que en Estados Unidos. Acá son bastante arduos, estamos todo el tiempo corriendo y es muy agotador. Pero con el tiempo adquirí el ritmo hasta tener buenas actuaciones”, destacó.

Bautista generalmente participa en las pruebas de 400 metros, 400 metros con vallas, 200 metros o las postas de 4×100 metros o 4×400 metros. Además, la Confederación Argentina de Atletismo (CADA) oficializó su marca de 600 metros en pista cubierta (1:23.28) como la mejor de todos los tiempos por parte de atletas nacionales.
"Me tomó por sorpresa. Realicé esa carrera en febrero a modo de preparación para una próxima competencia de 400 metros, y fue un logro espectacular que me alegró enormemente. Fue la única vez que lo corrí y conquisté algo que no me imaginaba”, remarcó.
Respecto al futuro inmediato, anticipó: "Aún me queda una competencia por delante, el torneo de la Gran Conferencia, que es un certamen que reúne a representantes de otras Universidades y se desarrolla durante tres días".
"Mi meta es mejorar mi tiempo en la prueba de 400 metros con vallas a 52 segundos, ya que necesito una marca de 52.40s para clasificar al Sudamericano de mi categoría, y creo que puedo acercarme o superar ese registro. También me gustaría tener una buena actuación junto al equipo de las postas para acercarnos al récord de la Universidad", puntualizó Bautista.
"No sé si para quedarme a vivir"
“Durante este verano trabajaré con dos compañeros y dos profesores para realizar un estudio con el objetivo de publicar un ensayo sobre un tema todavía no decidido, que posiblemente tenga que ver con el impacto de las redes sociales en la política. Luego, el año que viene tendré que terminar mi tesis para Ciencias Políticas y concluir las clases de Economía para poder graduarme en mayo de 2023”, anticipó.
También dejó en claro que mantiene la calma y no se apresurará para determinar su futuro. “Me gusta Estados Unidos, pero no sé si para quedarme a vivir porque siento muchas diferencias culturales importantes. Después de graduarme, analizaré si sigo estudiando o regreso a la Argentina y me vinculo en Relaciones Internacionales”, sentenció.
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El asado, el dulce de leche y la yerba
“Estoy muy bien acá, pero extraño a mis papás, mis hermanos y mis amigos, ya que hace nueve meses que no los veo. Los norteamericanos me ayudaron muchísimo, pero no es tan sencillo conectar con personas de otro país que tienen una perspectiva tan distinta”, indicó Bautista.
“En Paraná me manejaba caminando o en bicicleta, y acá si no tenés auto te queda todo bastante lejos. Además de eso, extraño el asado, el dulce de leche y la yerba; traigo varios kilos desde Argentina pero debo racionarla para que me alcance”, concluyó entre risas.