ASÍ SE MANTUVIERON EN CONTACTO
LAS ELEFANTAS DURANTE SU TRASLADO
La imagen es de Pocha y Guillermina, que son madre e hija y juntas fueron rescatadas del foso de piedra en el que vivieron durante 30 años.
Tras un megaoperativo en el que recorrieron 3300 kilómetros desde Mendoza, las elefantas asiáticas finalmente llegaron al Santuario de Elefantes de Brasil, donde ya están en libertad.
(La Nación)