HORROR EN CÓRDOBA: DOS HERMANAS FUERON ASESINADAS EN UN RITUAL SATÁNICO POR SUS PROPIOS HIJOS

Hace una semana Esther y Sara Castro eran buscadas con intensidad por personal de bomberos de la provincia de Córdoba y la Policía local. Este martes se conoció la peor noticia: ambas habían sido asesinadas y tiradas a un pozo de agua ubicado en la parte de atrás de su propiedad.
Según las primeras pericias, las mujeres de 41 y 39 años murieron a causa de disparos de un arma blanca, la cuál es buscada por los investigadores. El crimen fue cometido por sus propios hijos, ambos mayores de edad, quienes confesaron lo ocurrido y quedaron detenidos e imputados por homicidio calificado y homicidio en concurso real.
A su vez, también fue detenida una adolescente de 17 años, quien habría colaborado con los presuntos asesinos para descartar los cuerpos.
Según las primeras pericias, las mujeres de 41 y 39 años murieron a causa de disparos de un arma blanca, la cuál es buscada por los investigadores. El crimen fue cometido por sus propios hijos, ambos mayores de edad, quienes confesaron lo ocurrido y quedaron detenidos e imputados por homicidio calificado y homicidio en concurso real.
A su vez, también fue detenida una adolescente de 17 años, quien habría colaborado con los presuntos asesinos para descartar los cuerpos.

Los vecinos aseguraron que en la casa vivían más de diez personas, entre adultos, adolescentes, niños y bebés, y que el pasado jueves vieron cómo los acusados armaron una enorme fogata en el patio de la cual desprendía un olor nauseabundo.
En el lugar se practicarían "rituales satánicos" y en muchas oportunidades los vecinos alertaron a la policía al ver rezos extraños, alabanzas y crucifijos. Según relataron algunos testigos, los hombres eran "agresivos" y apenas mantenían diálogo con personas ajenas al círculo.
Cuando allanaron la casa, los investigadores encontraron palas, machetes, hachas y una maza con manchas de sangre. Una de las hipótesis que manejan es que podrían haber desmembrado los cuerpos para luego ser arrojados al pozo. (Fuente: Gente).