CASA TORRES LLEVA 113 AÑOS VISTIENDO A LOS VILLAGUAYENSES. Por Roque Jesús Alaguibe


Hace 113 años que la prestigiosa Casa Torres viste a la gente de nuestra ciudad y del departamento. El más que centenario sueño comienza en junio de 1908, cuando Juan Isidro Torres y María Dolores Coders, contraen matrimonio en Olesa de Monserrat, Barcelona, España.

Con gran experiencia como técnico textil, a Juan le interesaba formar su propia empresa, pero para lograrlo tomó un gran desafío como era el de vender todas sus propiedades, renunciar a las comodidades de trabajar en una gran firma y trasladarse a una tierra totalmente desconocida.




Inauguración del actual edificio de Casa Torres, en San Martín 529, en 1974. Hace uso de la palabra Tito Vásquez Gamboa, dueño de Suixtil, ante la presencia de Manrique y Mario Torres, propietarios de la empresa. Al fondo, Pedro Torres (hijo de Jaime), el padre José E. Lavini y Hugo Puchulu, entre otros. (Foto archivo Jorge Torres Lambert).


Acompañado de su esposa, su hijo Francisco Angel y su hermano Jaime Torres, emprendieron el viaje detrás de sus sueños a la Argentina.

Instalados en Villaguay en 1910, se radicaron en la esquina NO de Balcarce y Urquiza -donde hoy está una óptica-, con un local de peluquería, perfumería y taller de fabricación de sombreros. En este lugar se formaron ciudadanos de Villaguay, como Juan Arpí, Crisanto Casanovas y Modesto Volta, quienes luego se independizaron y se desempeñaron exitosamente.



Dado el aumento del trabajo, se compraron un terreno y construyeron su edificio propio en Balcarce 452 donde comenzó la pujante actividad comercial de Casa Torres, cumpliendo así los sueños de don Juan de vender camisería, artículos para hombres y sport.

Ante la necesidad de armar un taller de sombreros y oficinas de compra en Capital Federal, don Jaime se instaló en la calle Tacuarí, dándose la circunstancia de que la acreditada firma tenía una sucursal en ese importante centro, cuando generalmente es al revés.

En la década del 30, Francisco Angel, el mayor de los hijos de don Juan, con sus estudios de contabilidad realizados en La Plata, se incorpora a la empresa. Es así como ingresa la segunda generación.

La pasión por el deporte de Francisco, alentando el fútbol y todas las otras disciplinas, tiene gran repercusión en la vida deportiva de Villaguay. Recuerdo a “Don Pancho” ocupar la presidencia de la Liga Villaguayense de Fútbol por varios períodos.

Ya muy consolidado el comercio local, falleció don Jaime y cierran el local de Capital Federal.


Don Juan se retiró de la actividad en la década del 50, incorporándose Manrique, otro de sus hijos, el que le da impulso definitivo, en lo que hace a la comercialización de artículos para hombres y deportes.

Al fallecer su fundador en 1966, la empresa queda conformada por sus tres hijos, Francisco, Manrique y Mario, y en 1974 se trasladó al moderno local comercial de San Martín 529.

A partir de 1989 amplió sus actividades en lo que hace a la moda informal para el hombre y la mujer, lo que se logró a través de la incorporación de la tercera generación, con Jorge y Luis, hijos de Manrique y Mario, respectivamente.


Es un logro para nada fácil perdurar por tanto tiempo, y a la vez es un orgullo para Villaguay que esta empresa nos siga acompañando a lo largo de tantas décadas con la seriedad y responsabilidad del primer momento, cumpliendo con un sueño que arrancó hace nada menos que 114 años allá en la Madre patria.

Datos de la historia de Casa Torres, escrita por el Ing. Jorge Torres Lambert, nieto del fundador.

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