CASA VUOTO (LA VILLAGUAYENSE): UNA GRAN INDUSTRIA DE LA CIUDAD. Por Roque Jesús Alaguibe

Hay empresas que por su gran influencia en el crecimiento de los pueblos están llamadas a perdurar a través de los años. Tal el caso de "La Villaguayense" o "Casa Vuoto", como cada quien la recuerde, que fue fundada el 30 de septiembre de 1879, por el pionero italiano Luis Vuoto.

Desde Morano, distrito de Cosenza (región de Calabria), en septiembre de 1879 arribaron a Villaguay don Luis y su esposa Elena Palumbo. En el hogar Vuoto-Palumbo llegaron 14 hijos, siete varones e igual número de mujeres.

Se instalaron donde hoy está el Círculo Católico de Obreros, en calle Rivadavia, con una pequeña fábrica de botas. Acompañaron a don "Luiggi" en sus comienzos 5 obreros. Surtían tanto a la gente de la ciudad como del campo con arneses para sulkys y carros.



El gran empuje hizo que su progreso fuese continuo, y en 1886 se trasladó a su propio local, que se extendía por Rivadavia (actualmente donde se ubica el Sanatorio americano) hasta calle Industria (hoy Urquiza), continuando por la misma hacia el oeste.

Compró en 1910 la curtiembre a la sucesión Etchegaray, de Gualeguay, que se encontraba en calle Santa Cruz. Recuerdo que con el correr de los años pasó a ser de don Jorge Garnier.



Con la mecanización de "La Villaguayense", adolescentes de 12 y 14 años aprendieron a fabricar botas, recados, zapatillas, etc., donde ya sumaban 180 los obreros que acudían al llamado de la recordada sirena, la misma que don Delio Quiroz encendía los 31 de diciembre a las 24 horas, para anunciarnos un nuevo año.

Después de los ‘60, don César Homer Vuoto la cede en custodia a la policía, hasta que un día se la destina al cuerpo de bomberos voluntarios y se la instala en el cuartel de Tucumán e Isabel la Católica, donde cumplió funciones por varios años. Finalmente se la reintegraron al recordado periodista Luis “Pekas” Vuoto, nieto del fundador.



Según describe Justo J. Miranda, esta empresa se convirtió en una gran industria del pueblo y de la provincia, y abarcaba los rubros zapatería, talabartería, lomillería, curtiembre y fábrica.

En 1920 "La Villaguayense" se transformó en "Luis Vuoto e hijos", hasta 1935 cuando pasó a ser "Vuoto Hnos", hasta 1962, y luego "Casa Vuoto" hasta 1992, año en que bajó definitivamente sus persianas.