Dos bomberas del cuartel de Villaguay se descompensaron anoche mientras intentaban controlar las llamas que estaban arrasando una vivienda de calle Liniers entre Hermelo y Perón, en el barrio Villa Pedro, en la zona sudeste de la ciudad.
Rocío Aldecoa, de 26 años, fue trasladada al hospital Santa Rosa, mientras que Lucía Domínguez, de 32, estuvo en observación en E.R. Emergencias. Ambas ya recibieron el alta médica.
Aparentemente, fueron varios los factores que desencadenaron esa situación: la deshidratación, el agotamiento y el estrés derivados de las altas temperaturas y el exceso de trabajo que habían experimentando las dos mujeres al intervenir todo el día en varios hechos en la ciudad y el departamento.
Los bomberos concurrieron al lugar a bordo de dos autobombas (H9 y H4) y trabajaron en el lugar durante más de dos horas, casi hasta la medianoche. Lamentablemente, poco pudieron hacer para evitar que el fuego arrasara a la vivienda en su totalidad. Lo bueno es que ninguno de los ocupantes resultó herido.
En el campo
Los bomberos de Villaguay también participaron ayer en el control de tres incendios de campos, dos de los cuales tuvieron dimensiones considerables y requirieron la asistencia del personal de cuarteles de otras localidades. Son los siguientes:
* Incendio de campo en San Gregorio, a 30 kilómetros de Villaguay. Intervino la unidad de apoyo logístico H6, la unidad forestal H2 y la autobomba H9, de Villaguay, con la colaboración de personal y vehículos de Villa Elisa y Basavilbaso. Trabajaron durante siete horas, desde las 14 hasta las 21. Se quemaron aproximadamente 135 hectáreas de monte sucio y soja.
* Incendio de campo en Durazno (departamento Tala), a 50 kilómetros de Villaguay. Los bomberos concurrieron al lugar a bordo de la unidad forestal H2 y combatieron el fuego con línea devanadera (mangueras) y guachas. Se quemaron alrededor de 10 hectáreas.
* Incendio de campo en Aldea Pérez, en el distrito Raíces Oeste, a 60 kilómetros de nuestra ciudad. Los bomberos de Villaguay trabajaron en conjunto con personal de los cuarteles de General Campos, Viale y María Grande. Les demandó alrededor de cuatro horas controlar la situación.