FENÓMENOS PARANORMALES EN EL CAMPO DE LA SALUD. Por Daniel de Michele

¡Por fin un poco de disfrute leyendo el diario y oyendo la radio! La TV ya la miramos con barbijo porque tememos el contagio por bichos con coronita que brotan por los parlantes.

¡Los jueces de la Suprema Corte han decidido donar 25% de sus haberes al Hospital Muñiz de Baires! El beneficio alcanza a un hospital municipal como el Muñiz, especializado en enfermedades infecciosas, con una trayectoria única de 120 años. Fue bastión de la lucha contra el sida desde que se conoció el síndrome en los 80. Han pasado por sus salas cientos de científicos sobresalientes, entre ellos el Dr. Honoris Causa de la UNER, Paco Maglio.

Desde la cúspide de los asalariados/jubilados argentinos la Corte sorprende con un gesto solidario con aroma y mandato de ejemplo a seguir por sus congéneres de la justicia.

Por otro lado un juez condenó a Jose López por no poder explicar de donde sacó los 9 palos verdes embolsados, filmados y revoleados a un convent… no, no… fue negado que se tratara de un real convento y las hermanas, bueh… la hermana filmada solo ayudó a entrar los bolsos de López, una actitud apropiada para un monje asistiendo a un viajero en apuros y excedido de equipaje.

Se habló de 9 millones de dólares, joyas, relojes, euros y otras minucias que la justicia derramó sobre dos Hospitales de Niños porteños; el Garrahan y el Gutiérrez.

Hay en estas historias por lo menos tres emergentes que deseo extraer y destacar.

1. Subyace bajo la superficie visible, una acción de reconocimiento e intento de ecualización para con la niñez argentina sumida en la pobreza, la mayor víctima crónica e inocente de las desigualdades sociales que López ayudó a profundizar. ¡Bien ahí el juez!

2. Otra clara acción de reconocimiento es la de premiar la enorme tarea social del Sistema Público de Salud representado aquí por Hospitales Municipales/Nacionales que funcionan en CABA a los que acuden niños de todo el país. Creo que estas instituciones junto a las Universidades Nacionales, son hoy unas de las mas respetadas y generadoras de confianza en el ciudadano medio. ¡Bien ahí por la Justicia!

3. De estas decisiones de la jerarquía judicial emana una fumata blanca con moraleja implícita: "Basta de impunidad, cambiamos la lógica y esta vez ganan quienes trabajan seriamente por fines nobles y los niños pobres". No avanzar más hasta averiguar de quién era la plata fue leído por algunos ciudadanos utópicos como que la Justicia le hizo precio a la política. Un Lopecito arrepentido, soliviantado por la justicia fue condenado sólo a 6 años de prisión pero ademas salvó el pellejo del dueño real de los bolsos.

Dejando a salvo estas reivindicaciones, creo que esta buena decisión de la justicia puede aún ser mejorada: ¿Por qué no federalizaron esta nueva solidaridad que proponen?

El Muñiz, el Gutiérrez y el Garraham son destacadísimas instituciones que sostienen el Sistema de Salud Pública argentino. Esto es innegable y haberlos favorecido con fondos frescos hoy es oportuno y justo. Recordar también que están enclavados en la ciudad más rica de la Argentina, con los ingresos per cápita mas alto, la Tasa de Mortalidad infantil más baja y conviven con decenas de otros buenos hospitales de la Ciudad Autónoma. No digo que les sobre nada, pero están bien provistos y rodeados de todo.

Quiero decir, si de solidaridad se trata, podría pensarse en el interior profundo, en donde vive la otra mitad de la gente que habita este bendito suelo y en donde las necesidades de los hospitales públicos son tremendas al lado de las del Garraham.

Además consideremos que el dinero venido de la corrupción nos lo robaron a todos. Es decir, cuando de devolverlo se trata, que alguien piense en el interior donde estamos la otra mitad de los argentinos.

Dejando a salvo la calidad de servicios de los tres hospitales favorecidos, propongo que en lo sucesivo se considere apoyar a instituciones de Salud Publica que tambalean en nuestras provincias.

¡Pero bien ahí la justicia con estas audaces e inusuales decisiones!


Daniel de Michele
eljibaro2002@gmail.com