“POR MÁS EXPERIENCIA QUE TENGAN, SIEMPRE HAY ALGO QUE MEJORAR Y COSAS NUEVAS POR APRENDER O TRABAJAR”

Mariano Cola es uno de los entrenadores de hockey del club ADEV. Como toda disciplina nueva que se incorporó a la institución azul, esta actividad debe ganarse su lugar. Por lo cual, la etapa primaria corresponde a la inserción dentro de una entidad que durante muchos años sólo tuvo fútbol y básquet. En esta lucha se encuentra el hockey “linyera”, que cuenta con una buena cantidad de jugadoras en todas sus categorías, con ganas de aprender y competir. EL PUEBLO entrevistó al director técnico de la primera división femenina de esta manera.

- ¿Les estás mandando instructivos de parte física y entrenamientos a tus jugadoras para realizar en el hogar y no perder la forma durante la cuarentena?
- Sinceramente, yo nunca pensé que este parate por el coronavirus iba a ser tan extenso. Por lo cual, al principio les recomendé a las chicas una actividad tranquila como para no perder todo lo bueno que habíamos logrado durante la pretemporada. Esto es similar a lo que le debe haber pasado a todos los equipos de muchos deportes, yo consideraba que estaban muy bien físicamente entonces les pasé una rutina bastante general. Pero como la cuarentena va a continuar por un tiempo más, voy a tratar de implementar un entrenamiento más personal, porque sé las características de cada una de mis jugadoras. 

- ¿Hace cuánto tiempo que estás trabajando en ADEV con el hockey? - Hace un año y medio que estoy enseñando en ADEV, porque yo había empezado cuando arrancó el hockey en el club, hace alrededor de dos años y medio, dirigiendo a la categoría mamis, pero luego decidí dar un paso al costado por razones laborales ya que se me complicaba con el horario que doy clase en las escuelas. En ese lapso de tiempo continuó otro profesor y ahora retomé la conducción técnica tomando al equipo de primera división femenina. Esta temporada 2020 teníamos todas las intenciones de competir en un torneo, lo cual iba a ser una experiencia nueva tanto para las chicas como para mí. Pero por cuestiones económicas no pudimos concurrir a la primera fecha del certamen que se disputó en Diamante. Esto nos quitó un poco de incentivo en lo que respecta a la ventaja que dimos desde el inicio de la competencia, pero yo le expliqué a las chicas que nosotros lo que necesitamos es sumar partidos y minutos en cancha, en situación de juego, que no debemos preocuparnos por los resultados, al menos en esta primera etapa. El otro profesor que tiene a su cargo las demás categorías (mamis, primera masculina, juveniles e infantiles) es Alejandro Niz, con quien nos complementamos bastante bien. A veces en las prácticas tratamos de realizar actividades en conjunto (en las que participan dos equipos o más) para que los conjuntos puedan entrenar con un mayor nivel de oposición. 

- ¿Cómo se reparten el espacio físico de la “Terraza Azul”?
- Ese es justamente un tema que estamos viendo y que está bajo el análisis de la comisión directiva de la institución. El lugar para practicar es la cancha de fútbol, pero también se incorporó el rugby recientemente, por lo cual se hace complicado compartir el espacio ya que somos varias disciplinas y categorías. Nosotros estábamos practicando los lunes y miércoles. Junto al otro entrenador de hockey, dividíamos nuestros grupos en una de las mitades de la cancha, mientras que en la otra mitad entrenaba el rugby. Por su parte, los martes, jueves y viernes practicaba el fútbol. Somos conscientes de que tanto el hockey como el rugby son disciplinas nuevas dentro del club y no podemos pretender un espacio propio cuando el fútbol y el básquet han sido los deportes que históricamente realizó ADEV. Lamentablemente nos va a costar el tema cancha y sabemos que a la mayoría de los equipos de Villaguay les sucede lo mismo, salvo otras instituciones que han mejorado un montón y ya tienen su terreno de juego. Nosotros estuvimos durante un tiempo practicando en el predio del Crispín Velázquez, con lo cual se había aliviado bastante el trajín que debe soportar la cancha de fútbol. Continuamos despacito y tratando de hacer las cosas bien, yo creo que vamos a encaminarnos para que todas las disciplinas que tiene el club utilicen su propio espacio y convivan perfectamente.
- ¿Qué características tenés dentro de tu equipo? ¿Chicas que ya habían jugado al hockey anteriormente o jugadoras nuevas a las cuales hay que enseñarle todo desde cero?
- En nuestro equipo tenemos una especie de “popurrí” (risas), porque tengo chicas que arrancan de cero y también jugadoras que vienen de otros clubes o localidades, ya que en el plantel contamos con estudiantes de kinesiología y que han practicado anteriormente el hockey en sus distintas ciudades de origen. Por más experiencia que tengan, siempre hay algo que mejorar y cosas nuevas por aprender o trabajar. Lógicamente, cuando vienen chicas nuevas, durante los primeros entrenamientos hay que trabajar con ellas aparte y luego se suman al resto del grupo cuando van aprendiendo el desarrollo del juego. Pero igualmente se hace cortito el tiempo de una práctica (1 hora y media) y justamente este año teníamos pensado dedicarles otro día en la semana a las chicas que recién empiezan. Porque se genera una situación en la que por prestarle más atención a un grupo (las que son nuevas) se descuida al otro (las que ya tienen rodaje) y no queremos que eso suceda.
- ¿Cómo están en cuanto a ropa deportiva?
- Con respecto a la indumentaria, los equipos que ya venían trabajando tienen sus camisetas. En cambio, el grupo mío al dividirse las categorías, arrancamos de cero, es decir que no teníamos remeras ni nada. Empezamos a juntar dinero a través de rifas, comidas y pudimos lograr hacernos nuestro primer juego de camisetas, más adelante veremos la posibilidad de comprar las polleras y las medias, como para que esté bien presentado el equipo. Después la parte de los palos, yo tengo algunos entonces, a las chicas que recién empiezan se los presto porque son elementos caros, no son muy accesibles. Entonces les digo que prueben una o dos semanas, que si les gusta y están convencidas, las asesoro para que se compren su propio palo. En cuanto a las bochas, hace unos meses valían $150 o $200 pesos, ahora seguramente se habrá elevado el costo. Con relación a este tema, en cada práctica salimos con diez bochas y volvemos con ocho (risas), porque siempre se nos pierde alguna. Permanentemente les digo que tienen que seguir con la vista cuando la bocha se va afuera así después las pueden buscar. El traje de arquero es carísimo (uno básico debe costar arriba de los $50.000). Lo que sucede es que los clubes, la mayoría de las veces compran uno sólo y se lo van prestando entre todas las categorías pero de esta manera, en poco tiempo se va deteriorando, entonces no cumple su misión de aminorar el efecto de los golpes de la bocha, ya que los arqueros los sienten y ahí está en problema.