Seguinos en Facebook Seguinos en Instagram Seguinos en Threads Seguinos en TikTok Seguinos en Bluesky Escribinos por whatsapp Escribinos por Telegram

Fausto Cáceres: “ANTES SE JUGABA FUERTE Y SI NO LO HACÍAS LA LIGABAS VOS”


Parque década del 70, Fausto Cáceres, el sexto desde la izquierda arriba

Durante las décadas del 60´ y 70´, Fausto Oscar Cáceres marcó una época en la zaga del Club Atlético Parque, imponiendo su presencia y compartiendo dupla como marcador central con otras destacadas figuras “albas”. Con el sello de una rudeza que lo caracterizó durante toda su trayectoria, supo ganarse el respeto de los delanteros rivales. También sobresalió como director técnico de bochas, dirigiendo con éxito las selecciones infantiles y juveniles de la Asociación de Bochas Villaguay en distintos campeonatos entrerrianos y argentinos. 


- ¿Por qué te hiciste jugador de Parque?

- A los 12 años, con la autorización firmada por mi madre, Miguel García me fichó en Parque. Un gran amigo, siempre estuve muy agradecido con él y luego del paso de los años tuvimos la suerte de jugar juntos conformando la zaga (él como “número 2” y yo de “6”). No tenía los 16 años cumplidos cuando debuté en primera. Fui a jugar a la reserva y cuando terminó el partido me dijo Roberto Blasón (“número 5” de Parque): “No te vayas Fausto porque vas a tener que jugar en primera”. Cuando nos estábamos cambiando me dio la camiseta “número 2” y jugábamos contra Santa Rosa en cancha de Salud Pública. Le dije que era demasiado, porque siendo tan joven me iba a enfrentar con Koch, Hidalgo y el “Negro” Rubio. Entonces me contestó “no te hagas problemas, voy a jugar la lado tuyo”, yo me quedé tranquilo, pero durante el partido jamás estuvo cerca para ayudarme en ninguna jugada (risas). Al final salió todo bien y ganamos 3-2.


- ¿Cuándo conformaste aquella tremenda dupla con tu amigo Ernesto Lucio Kinnen?

- Ernesto jugaba en Barrio Sud junto a Carlitos Olivera, aparentemente el DT Juan Portillo no los tuvo en cuenta y se vinieron a Parque los dos. Con Kinnen jugamos varios años juntos y nos entendíamos muy bien, éramos una zaga casi impasable, pasaba la pelota pero el jugador no (risas). Después también jugamos juntos varios años en Veteranos. Yo siempre jugué fuerte porque esa era mi característica, pero leal y gracias a Dios nunca lastimé a nadie. Jamás fui con mala intención de lastimar a nadie o de pegar un codazo en la cara, aunque en el cuerpo sí, porque no voy a mentir (risas). La prueba está en que a pesar de mi juego, me echaron una sola vez en los 35 años que jugué al fútbol. Eran otros tiempos, porque antes se jugaba fuerte y si no lo hacías la ligabas vos. Pero cuando finalizaba el juego, luego de habernos insultado y pegado durante 90 minutos, nos saludábamos y felicitábamos sin ningún tipo de rencor. Recuerdo por ejemplo con Miguel “Tico” Verón protagonizamos grandes clásicos, él defendía la camiseta de Barrio Sud o la de Policial y yo la de Parque. Con “Tico” nos “dábamos con un caño” adentro de la cancha pero terminaba el partido y salíamos abrazados.


- ¿Siempre jugaste en Parque o en alguna oportunidad vestiste otra camiseta?

- En el año 1968 jugué en Deportivo Villaguay pero en la Liga Independiente, porque mi primo “Coco” Cáceres era el DT del “Depo” y quiso que jugara con ellos una temporada. Al año siguiente, Deportivo se afilió a la Liga Villaguayense y ascendió a primera, tenían que pedir pases y me solicitaron a mí. Pero Parque les pidió por mí (ni que fuera Maradona) diez pares de zapatos de fútbol. Lógicamente, el “Depo” no tenía dinero para solventar ese gasto, entonces me quedé en Parque. Un tiempo después jugué la Liga Independiente para el equipo de Obras Sanitarias. Además, un día me pidió de refuerzo Sarmiento para jugar un partido amistoso contra Belgrano (Paraná), en devolución de atenciones por el pase del “Negro” Darío Rovetta. Fue una gran satisfacción, nos habían pedido a Francisco “Panchito” García, al “Vasco” Alzogaray y a mí. Como anécdota, ese día jugué de lateral izquierdo (“número 3”).


- ¿Y en el fútbol de los barrios para que equipo jugaste?

- Varios años jugamos con Obras Sanitarias, pero también vestí la casaca de Goldaracena y de Simón Bolívar, consagrándonos campeones en ambas oportunidades. Después jugué en otros equipos que no recuerdo sus nombres porque me venían a invitar y yo aceptaba sin preguntar ni quién jugaba ni si habían armado un cuadro competitivo. Inclusive me sucedió que ya estando comprometido con un equipo, venían a buscarme de uno de los candidatos, pero les decía que me disculparan porque ya había dado mi palabra.


- ¿Cuáles fueron los delanteros que más trabajo te dieron y con qué compañeros te sentiste mejor en la defensa?

- Hubo dos jugadores adversarios que siempre respeté mucho, uno es “Churi” Zabala, con quien somos grandes amigos y el otro era “Machito” Segovia. “Churi” era un jugador muy inteligente, que hacía jugar a sus compañeros, mientras que “Machito” era habilidoso, te amagaba a patear con la izquierda y le daba con la derecha con igual potencia y precisión. En aquella época había grandes jugadores, tanto delanteros como defensores. Recuerdo que una vez le dije a “Panchito” García que yo no podía ni atarle los botines a él por la gran calidad que tenía para salir jugando a lo que él me contestó: “Pero yo no me hago respetar porque no le pego a nadie” y me ofendió de movida (risas). En Parque tuve muchos compañeros en la defensa, con quienes formamos buenas duplas, por ejemplo con Ernesto Kinnen muchas veces nos intercambiábamos las posiciones sin problemas, otra zaga muy dura formamos con Luis “Varace” López y con Roberto Declerq éramos “bartoleros”, es decir sacadores de pelotas, con Carlitos Olivera también jugamos juntos en el fondo. Solamente una vez tuve la suerte de salir campeón en primera vistiendo la camiseta de Parque, fue en un Torneo Preparación en el cual le ganamos por 6-5 una final increíble a un equipo de San Salvador, con cuatro goles de “Cachito” Lazzari.


- ¿Hasta qué edad jugaste al fútbol?

- En primera jugué hasta los 35, los cumplí en octubre y en enero ya estaba firmando para los Veteranos de Parque y jugué en esa categoría hasta los 47. Cuando dejé no quise ir más a la cancha para no tentarme porque si iba a mirar, alguno me iba a decir “Fausto, acá tengo botines, camiseta y pantalón corto, vení a jugar con nosotros”. Yo sabía que no me iba a poder negar, así que opté por no concurrir más. Recuerdo las cosas que uno hacía gracias a la pasión por la pelota. Si habré pagado para que me cubran en la guardia de Obras Sanitarias para poder ir a jugar en Veteranos. Le decía a un compañero: “A las 2 menos cuarto te preciso acá, porque jugamos a las 2, yo vuelvo a las 4 menos cuarto”. Ni bien terminaba de jugar salía de “rompe y raje” para bañarme e ir de vuelta al laburo.

Publicidad