ESCUELA-IDEOLOGÍA. Opinión, por Edgardo Ramón Redruello
Habiendo leído en la publicación del día martes 15 de septiembre del corriente año el articulo suscrito por el movimiento ciudadano “Mujeres por la Republica” y que lleva el titulo de ESCUELA, el mismo trasunta una opinión del cual, por supuesto, comparto, y en base a ello reflexiono lo siguiente y comienzo citando un pensamiento de quien fuera presidente de la Nación, el doctor Raúl Alfonsín, y que decía lo siguiente “La educación es la única forma de romper con la transmisión genética de la pobreza”.
Este pensamiento del expresidente, si bien ya ha sido acuñado por políticos comprometidos con la democracia, no deja de estar vigente, y por cierto es una realidad que la educación es la forma que se puede terminar con la pobreza provocada por aquellos que necesitan de ella para que a través de las dadivas puedan tener rehenes que le permita perpetuarse en el poder.
Por ello es imprescindible que deje de existir la ideologización en los educandos tanto a nivel primario como secundario, tal es así que se ha producido una desviación del pensamiento introduciendo en la enseñanza una determinada ideología en lugar de llevar a los educandos a la universalización de las ideas, lográndose como consecuencia, fomentar pasiones y fanatismo.
Todo esto ha llevado a que a los argentinos se nos haya formado de tal manera que en cualquier reunión donde se habla de política se discutan pasiones y no ideas, porque eso es lo que realmente les interesa a aquellos aventureros que se dedican a la política en fomentar la división y provocar grietas que llevan al enfrentamiento en lugar de los consensos; La verborragia de ellos son slogans tales como “Los pueblos nunca se equivocan”, “La pobreza digna”, lo que resulta una total falacia.
En relación al primer slogan citado un solo ejemplo lo desvirtúa “Los pueblos que nunca se equivocan llevaron a la Alemania de Hitler y a la Italia de Mussolini a provocar el drama más grande del siglo XX como fue la Segunda Guerra Mundial”.
Ejemplos como estos han abundado en los Estados Unidos de América, en países de Latinoamérica y así también en otras partes del Universo; Para citarlos a ellos necesitaríamos toda la edición de un diario.
En cuanto al segundo slogan mencionado, estos “samaritanos” de la política llenan sus discursos hablando de la “pobreza digna”; y nos preguntamos ¿Puede ser digna la pobreza cuando por este estado de la persona no llega a cubrir las necesidades básicas?, claro que no, la verdadera dignidad esta en el individuo pobre que día a día lucha y se esfuerza por llevarle el pan a su familia, además lucha y se esfuerza porque sus hijos puedan recibir una educación adecuada; es ahí donde debemos mirar que esta la verdadera dignidad, la de este individuo mencionado.
Pero ¿Qué es lo que ha ocurrido?, la respuesta es sencilla.
Aquellos individuos, los demagogos y corruptos del sistema han llevado a que cuando gobiernan el presupuesto para la educación sea lo más bajo posible, y eso los lleva a generar estados de pobreza, a que se carezca de educación y por lo tanto la dominación resulta más factible.
Estos personajes han llevado a crear una brecha entre la educación eficaz para pocos y un educación para pobres, y han sumido a la escuela en una inmersa crisis social en la que predomina la violencia y donde se postula como un lugar de alimentación, contención y no de enseñanza, por eso entiendo que el pensamiento citado al principio de que la educación es la única forma de romper con la transmisión genética de la pobreza, debería ser la vacuna necesaria, para evitar la propagación de ese mal endémico y los destinatarios de esa vacuna deberían ser todos aquellos que tienen la vocación de llevar el país hacia un destino de grandeza.
Su programa, el de generar dádivas en lugar de fomentar la cultura del trabajo y llevar al ciudadano a no poder proveer a sus hijos de una educación elemental porque al atender la pobreza con falsos planes de asistencia no permiten realizar ese cometido, que es el objetivo de la educación de ahí que lo fundamental de una educación para todos es primordial y fundamentalmente contener una universalidad de ideas y no de ideologías.
Porque lamentablemente llegan docentes al nivel secundario y universitario con la única intención de imponer una ideología reñida con los principios de la Constitución Nacional, violando de esa forma los principios fundamentales que establece un régimen democrático.